HEREDIANS: ALMA DE BLUES Y CORAZÓN ROCKERO

"ALMA DE BLUES Y CORAZÓN ROCKERO". ASÍ SE DESCRIBE HEREDIANS. ESTA BANDA DE ROCK SEVILLANA APUESTA DECIDIDAMENTE POR UN SONIDO CLÁSICO, AUNQUE IMPREGNADO DE SU PROPIA PERSONALIDAD. "SIEMPRE SUENA AL SUR", EXPLICA ÁLVARO HEREDIA, VOCALISTA DEL GRUPO. CADA UNA DE SUS COMPOSICIONES SE CONSTRUYE DESDE LA ADMIRACIÓN, LA PASIÓN Y EL RESPETO QUE SIENTEN POR LOS GRANDES MAESTROS DEL ROCK Y DEL BLUES, ESPECIALMENTE AQUELLOS DE LA DÉCADA DE LOS 60 Y LA DE LOS 70. POR TANTO, HEREDIANS NO ES SÓLO UNA FORMACIÓN MUSICAL, ES UN VEHÍCULO DE TRANSMISIÓN QUE PRETENDE PERPETUAR EL AUTÉNTICO SONIDO DE LAS BANDAS DE ROCK. PARA ELLOS LA MÚSICA ES UNA FORMA DE ENTENDER LA VIDA, POR LO QUE ESTÁN CONVENCIDOS DE QUE NO HAY MEJOR META QUE DISFRUTAR DEL CAMINO.

BACKSTAGE MAGAZINE

_El calor habitual de Sevilla invita a que suenen acordes de guitarra. Esta tierra del sur de España ha formado a grandes artistas que nos han deleitado con su talento, no sólo en el flamenco, sino también en el rock, en el jazz y en otros tantos géneros. En este contexto surge Heredians, una banda de rock con fuertes influencias del blues y con ese aire sureño tan característico. Formada por Álvaro Heredia (voz y guitarra), Joaquín Sainz (guitarra), Fabio Pérez (bajo) y Dani Garzón (batería), Heredians es mucho más que una banda, es un grupo de amigos que tienen un nexo muy potente en común: el amor por la música. En Backstage Magazine hemos podido disfrutar de dos encuentros muy cercanos con ellos: en primer lugar, fuimos a la casa de Álvaro, fundador y líder de la agrupación y quien nos desmenuza algunas claves del proyecto; posteriormente, estuvimos en el Hard Rock Café Sevilla, ya con Heredians al completo, donde asistimos a una actuación en directo para, más tarde, recoger algunas motivaciones e inquietudes y conocer mejor a la banda.

Álvaro Heredia es un loco melómano que escucha de todo. Una noche de vinos en su casa nos dio para escuchar rancheras, joropos venezolanos, rumbas catalanas del gran Peret, flamenco en la voz de El Cabrero e incluso las versiones metaleras de un Juanes de quince años que el propio Álvaro no se creía: "¡Qué pasada! Nunca pensé que este tío viniera del heavy". Él es uno de esos músicos obsesivos de las buenas letras; según cuenta, "los arreglos y los acordes deben ser muy limpios, pero las letras siempre tienen que decir algo". Tenía calor, así que decidió quitarse la camiseta y encender un cigarrillo, mientras el cenicero esperaba en una mesa que una vez fue una señal de tráfico. Conocer las cuestiones vitales de cada uno es trascendental. Para Álvaro la música es "el flotador que te salva de no ahogarte en el mar de la vida, ese que siempre te chupa y te tira para abajo. La música es eso que te permite tener la cabeza aunque sea por encima. Es algo más grande que uno, es un lenguaje superior, es el ser superior de la expresión".

Para encontrar el origen de Heredians habría que retroceder en el tiempo más de una década. "Si nos remontamos a lo más inmediato, hablaríamos de mis grabaciones en solitario contando con varios músicos", recuerda Álvaro, "pero creo que viene desde más atrás, cuando creamos Noctámbulos, una primera banda con la que hacíamos mis canciones". Noctámbulos, en la que ya figuraban Álvaro y Joaquín, fue el predecesor de Heredians, sin embargo, antes de aquel grupo también hubo otras formaciones donde tocaron juntos, "así que realmente la idea siempre había estado ahí". Y es que la mayoría de los integrantes que han pasado por la banda se conocen desde pequeños. Álvaro y Joaquín, por ejemplo, son amigos desde los diez años: "Tiene un talento extraordinario para la guitarra, creo que a las personas de Sevilla les hacía falta escucharlo. Ahora que lo han escuchado muchos se han quedado con la boca abierta". Otro aspecto muy importante reside en lo que aporta cada uno en cuanto a influencias y gustos musicales. En ese sentido y continuando con el ejemplo de Joaquín, Álvaro considera que "es muy interesante porque tiene un abanico muy amplio, escucha mucho jazz y géneros diferentes".

Portadas de los dos álbumes de estudio que ha publicado Heredians hasta el momento: 'A medio paso' (2012) y 'Un náufrago en la Luna' (2015)

En el año 2010 nace Heredians como tal. Tan sólo dos años después vería la luz el primer disco de la banda, denominado A medio paso: "En un primer momento, al ser una apuesta personal, lo pagué y lo lideré yo. Posteriormente, cuando vimos que esto iba a funcionar, decidimos unir el proyecto y llevarlo entre todos". La concepción de este trabajo se llevó a cabo principalmente en dos fases, una primera en la que Álvaro había estado componiendo y escribiendo, y una segunda en la que, tras una ruptura amorosa, analizó las letras en profundidad y terminó de escribir las últimas canciones. Por esta razón, A medio paso es "un disco muy trabajado en cuanto a las letras y composiciones, pero grabado con muy pocos medios. Sin embargo, hace poco volví a escucharlo, que llevaba mucho tiempo sin hacerlo y dije "¡qué bien está!"". Musicalmente se trata de un álbum muy abierto, un compendio de varios estilos como el blues, el folk, el rock, hard rock o el boogie. En definitiva, una carta de presentación que representa a la perfección el espíritu de la banda: buen gusto, humildad, sinceridad y mucho oficio.

El siguiente disco de Heredians se concibió de manera diferente. El grupo planteó la opción de financiar este segundo trabajo a través del crowfounding, ofreciendo a cambio dos conciertos gratuitos: "Las personas respondieron de una forma increíble. Más de 150 personas en un local de Sevilla, una cosa en estos tiempos muy difícil para bandas que llevan poco tiempo". Así, en el año 2015 publicaron Un náufrago en la Luna, un álbum que, entre otras cosas "nos habla sobre lo que significa ser músico en Sevilla". "Es muy complicado dedicarse a la cultura. A veces te sientes en fuera de lugar, que no pintas nada en este mundo", confiesa Álvaro. Un náufrago en la Luna es un disco más duro, concebido en el local de ensayo por toda la banda y con una intención más definida. En cuanto a su sonido, se apoya más en el hard rock, excepto algunos temas cercanos al blues como Rumbo al sur. La buena acogida de su propuesta musical y la gran respuesta por parte de la gente animó aún más a la banda a continuar con este camino: "Siempre le vamos a dar las gracias a todas esas personas que nos apoyaron y que han permitido poder sacar el disco".

Heredians interpretando 'A todo trapo'. / BACKSTAGE MAGAZINE

Después de presenciar la actuación de Heredians en el Hard Rock Café Sevilla, nos citamos con la banda en el Glam Rock, uno de los salones de la primera planta del establecimiento. Mientras se toman algunos minutos para relajarse, Álvaro, Dani, Fabio y Joaquín observan y comentan la memorabilia del lugar, especialmente las guitarras de artistas tan diferentes como Antonio Carmona (Ketama) o Paul Stanley (Kiss). Este lugar es historia viva del rock y eso se palpa en el ambiente. Una vez ya están sentados y acomodados, damos inicio a nuestra entrevista.

BACKSTAGE MAGAZINE: ¿En qué momento supisteis cada uno que queríais dedicaros a la música?
FABIO PÉREZ: Yo se lo debo a mi padre, que siempre ha sido un forofo de la música rock de los 60 y los 70; los Beatles, los Rolling Stones... siempre en casa tuve esa cultura musical. Desde muy temprana edad empecé con la guitarra, a partir de ahí ya me pasé al bajo y aquí estamos [risas], luchando en la batalla.
ÁLVARO HEREDIA: Yo empecé en la adolescencia a meterme mucho más en la música y a escuchar bandas como Pearl Jam, Soundgarden o Nirvana. Esa época me cogió a mí siendo un chaval, con quince o dieciséis años, y fue cuando realmente decidí que eso era lo que quería hacer. Pero, claro, en aquel momento lo ves todo como un sueño muy lejano.
DANI GARZÓN: Yo cuando era chico vi un concierto de Celtas Cortos con sus primeros discos como Tranquilo majete y aquellas giras. Era un retaco, y cuando vi la que había montada allí con el humo y la batería dije "eso es lo mío".
JOAQUÍN SAINZ: Yo conozco a Álvaro desde la adolescencia, escuchábamos las mismas bandas y también tuvimos el primer grupo juntos. Entonces, fue una cosa común.

BKS: ¿Qué es la música para vosotros?
A.H.: La música para nosotros es una forma de entender la vida, una forma de vivir, una forma de pensar. No es sólo un género, es muchísimo más que eso; es una forma que nos ha marcado a los cuatro, además, un camino muy concreto, que es diferente al camino de la mayoría de las personas. Para los músicos es algo complicado. Creo que para nosotros la música significa eso, una forma de entender la vida y una forma de recorrer un camino.

BKS: Habéis comentado las influencias de cada uno, pero ¿hay algún grupo que tengáis en común?
F.P.: Led Zeppelin, AC/DC, Deep Purple, Jimi Hendrix...
A.H.: Hay muchísimos. Nos encantan los Rolling, Led Zeppelin, Jimi Hendrix... sobre todo de la música del hard rock de los 70 nos gustan casi todas las bandas: Black Sabbath, la Creedence (Clearwater Revival)... Todos tenemos en común ese sonido.

BKS: Aparte del rock, ¿qué más géneros soléis escuchar?
A.H.: Blues sobre todo, rock y blues. Creo que es como alma de blues y corazón rockero, un poco así.

La banda Heredians al completo. De izquierda a derecha: Joaquín, Fabio, Dani y Álvaro. / Cristina BAQUERIZO

BKS: ¿Qué significa la banda Heredians para vosotros? ¿Cómo vivís el día a día desde dentro?
A.H.: Es el proyecto que nos ha permitido saber que empiezan a salir cosas sabiendo ya qué es lo que no hay que hacer. Entonces, en cierto modo es la consecuencia de todos los fallos que hemos tenido.
J.S.: Yo creo que Heredians es un vehículo para poder transmitir esas referencias y esa música que hemos hablado antes; y, a la vez, es un vehículo de comunicación.
A.H.: Lo ha dicho perfecto [risas].

BKS: ¿Y qué aporta cada integrante de la banda?
A.H.: Creo que fuera aparte de la música incluso, aunque a todos nos guste el mismo tipo de música, cada uno tiene su propia personalidad. Joaquín es, digamos, la cabeza, es el que tiene la mente más fría de los cuatro, el que razona mejor, por decirlo de alguna forma. Dani, por ejemplo, creo que es el corazón de la banda, lo que hace que tire para adelante, el que nos empuja realmente con su personalidad. Fabio es afortunadamente un fichaje que hemos hecho que ha sido genial, estamos increíblemente contentos con él; da igual donde lo pongas que te lo hace bien [risas]. Es un tío muy trabajador, además, siempre trabaja con una sonrisa en la boca y eso es muy importante. Son cuestiones personales diferentes que cada uno aporta después a la hora de la música, la personalidad de cada uno también influye mucho ahí.

BKS: ¿En qué consiste vuestro proceso de creación?
A.H.: El proceso de creación cambia, no es siempre igual. Algunas veces soy yo el que empieza la idea, digamos, de la columna vertebral de un tema que hago en mi casa. Otras veces pues simplemente los prepara alguno por su cuenta y luego lo ponemos en común. Pero después ya cuando realmente se le pone el corazón, los riñones y el pulmón a la canción es cuando nos ponemos todos juntos. Es más gratificante así porque entre todos nos vemos involucrados. Cada uno aporta lo suyo. A lo mejor hay temas que han empezado directamente de una línea de bajo y a partir de ahí hemos empezado el tema. El proceso creativo no es siempre de la misma forma. Afortunadamente ahí todos aportamos mucho, que es lo más importante.

BKS: ¿A qué diríais que suena Heredians? ¿Cómo describiríais vuestro sonido?
F.P.: Pues creo que Heredians es un grupo de rock influenciado mucho por la música de los 60 y los 70, con un poquito de influencia del blues también, que componen temas con gran personalidad y en castellano, para que se entiendan, que siempre estaba la etiqueta de que el rock tiene que ser en inglés.
A.H.: Siempre digo que nuestro sonido es muy sureño, es algo que sale solo. Cantar en castellano es muy importante y a la vez es una mezcla de rock de ahora y sonidos antiguos. Es lo que nos gusta, que suene lo viejo pero que se sepa que está grabado ahora.

Heredians interpretando 'Jorge 'El sucio''. / BACKSTAGE MAGAZINE

Durante los últimos años, Heredians ha ido poco a poco ganándose un sitio dentro de la escena del rock andaluz. En el mes de diciembre del año 2013 dieron su primer gran concierto, concretamente en el Corrala Rock Sevilla. Desde entonces, han tocado en diversos festivales como el Territorios Sevilla, el Agrio Rock o el Teba Rock, entre muchos otros. Además, han podido compartir escenario con bandas de la talla de Soziedad Alkoholika, Narco, Sínkope, Porretas, Boikot, Trashtucada o Def Con Dos, grupo con el que incluso actuaron como teloneros durante varios conciertos de su gira en 2014.

BKS: ¿Cómo resultaron aquellas veces que empezasteis a enfrentaros a los directos? ¿Cómo fue la experiencia en aquellos primeros conciertos y festivales?
J.S.: Pues al principio en los primeros teníamos mucho respeto e incluso un poco de miedo. Cuando uno empieza a subirse a escenarios grandes y ve las producciones que hay detrás dice "ya no estamos tocando en bares ni en sitios parecidos". Ya una vez que le cogimos el gustillo pues fue bastante bien. La verdad es que lo disfrutamos.
A.H.: De todos tenemos un grato recuerdo, pero realmente el primer concierto importante que dimos fue en el Corrala Rock. Fue la primera vez que confiaron en nosotros; tocamos al lado de bandas como Narco, Def Con Dos, Porretas... gente muy profesional que lleva veinte años dando conciertos. Nos metieron allí y todo el mundo nos miraba como diciendo "¿está gente quiénes son?". Fue una gran experiencia, un gran concierto, a las personas les gustó mucho y nos empezaron a escuchar. Eso nos abrió las puertas a más cosas. Después ya llegaron otros festivales como el Territorios Sevilla. Lo dimos todo e incluso la gente de la organización nos felicitó y nos dio un gran balón de oxígeno. A partir de ahí fue cuando la banda empezó a crecer.

BKS: ¿Qué sentís cuando subís a un escenario a tocar?
D.G.: Un escenario creo que es la meta, el objetivo que tenemos nosotros siempre. Todo lo que trabajamos a diario, semanalmente, mensualmente siempre está enfocado hacia eso: el escenario. Al final al tocar en un local disfrutas, pero si no lo focalizas ahí no tiene sentido, si no compartes con la gente… Yo me siento, por ejemplo, y supongo que todos, lleno, es cuando estamos más llenos. Cuando yo me siento más realizado es cuando estoy en un escenario. En mi vida diaria hago muchas cosas, pero siempre estoy focalizado al momento especial de subir a un escenario. Creo que es el punto clave.

BKS: Al final trabajáis y componéis pensando siempre en eso.
D.G.: Exacto. De cara al público.

Los integrantes de Heredians no actúan sólo como músicos, sino que prácticamente sienten la obligación de actuar como defensores e incluso divulgadores de ese sonido vintage que tanto admiran. La banda siempre ha encontrado en las décadas de los 60, 70 y 80 un espejo en el que mirarse, buscando traer al presente la esencia de entonces a través de los ritmos, las melodías o las letras; eso sí, actualizándola y dándole su toque personal para hacerla suya. Por lo tanto, uno de sus grandes retos, tal como apunta Dani, es acceder a las nuevas generaciones, acostumbradas a un sonido mucho más electrónico: "Si se le puede llegar a esa juventud en los directos y demás, pues buen trabajo que hacemos como rockeros que somos". Es decir, también utilizan su música para conectar épocas muy diferentes, siempre con el hard rock como telón de fondo.

La música es una forma de entender la vida. Los artistas viven por y para su profesión, disfrutan y sufren con ella, afrontando continuamente una realidad tan incierta como apasionante. "He tenido mucha suerte de poder hacer todo eso que he querido, pero en el camino te das cuenta de que las cosas no son tal y como las soñaste", reconoce Álvaro. Y es que todos los que dedican gran parte de su vida al arte de las musas son muy conscientes de que este camino está plagado de dificultades e imprevistos. Un camino que también requiere grandes dosis de esfuerzo y una motivación constante con el objetivo de intentar mejorar cada día. Aun así, todo ello no altera lo más mínimo la hoja de ruta de Heredians ni la manera que tiene esta banda de sentir la música; saben divertirse y exprimen al máximo cada uno de los momentos que les brinda su gran pasión. Además, nunca se olvidan de seguir siendo ellos mismos y hacer música "con la mayor verdad posible". "Lo importante es que la meta es el camino", explica Joaquín, "disfrutar y seguir creciendo poco a poco, pero sobre todo creer en lo que hacemos. Si tenemos que sacrificar algo para llegar a otro sitio, mejor no hacerlo y seguir disfrutando donde estamos".

B.M.: ¿Qué ha sido lo más complicado del camino hasta el momento en el mundo de la música?
J: En el mundo de la música lo más complicado ha sido y sigue siendo seguir avanzando. Es difícil. Hoy en día hay muchos canales por los que las bandas pueden publicar su obra, pero a la vez hay mucha competencia. Luego también tenemos el problema cada vez más creciente de las bandas de versiones. No es que sea malo, pero realmente si empiezan ya incluso a montar festivales de bandas de versiones, la gente ya no está demandando algo nuevo, quiere lo de toda la vida.
A.: Puede que también haya sido difícil poner de acuerdo a todas las personas. Primero hay que tener muy claro cuál es la dirección, tenemos que pensar igual o al menos de forma parecida. Una vez que logramos eso fue cuando supimos que teníamos una banda. También hay que tener un equipo de trabajo que crea en el proyecto y lo haga de manera seria. Los músicos nos solemos empeñar en llevar todo, incluido lo que está fuera de lo musical, es decir, los bolos, la comunicación... y normalmente lo hacemos mal. Sabemos de música, pero no de lo otro. Es importante formar un equipo que permita dividir el trabajo, desde el tipo de la furgoneta hasta el que nos lleva la comunicación o el mánager; hay que hacer un equipo para que todo funcione. Nosotros ahora lo tenemos, ha sido muy complicado y ha sido poco a poco pero lo tenemos. Primero nuestro mánager, Pedro, luego la discográfica y ahora la agencia de comunicación. Vamos viendo que se va creando algo muy bueno.

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